Dice que en la economía estadounidense, que se sostiene de la política fiscal, comienzan a aflorar los fundamentos débiles, luego de la caída registrada en los mercados bursátiles de Wall Street, Europa y Asia, que muchos ya han denominado “lunes negro”.
Aduce que se espera que la FED baje las tasas de interés sin esperar la meta de baja inflación y se den las anticipaciones de muchos analistas de que habrá una estanflación en la economía, con poco crecimiento, deterioro en los indicadores de empleo y una inflación alta que llevaría a la FED a intervenir.
Para Collado Di Franco, República Dominicana, se verá afectada por el vínculo externo: turismo, zonas francas y remesas, además de que se mantendrían altos los niveles de precios nacionales, incluyendo las materias primas, afirma Collado Di Franco, vicepresidente ejecutivo del Centro Regional de Estrategias Económicas Sostenibles (CREES)..
“Es decir, que este panorama tendría un impacto negativo sobre la economía dominicana”, indicó.
No obstante, los profesionales de la economía Richard Medina y Ellen Pérez Ducy estiman que hay que esperar el transcurso de los acontecimientos.
Martínez afirma que de inmediato no debe haber impactos sobre la economía dominicana. “Hay que esperar a ver cómo se desarrollan los acontecimientos. Salvo por el Nasdaq, ya que es el índice bursátil de las empresas tecnológicas de Estados Unidos, los demás índices mejoraron durante el día aunque siguen en terreno negativo”.
Si la Reserva Federal baja su tasa de política monetaria en septiembre, eso hará que los activos en pesos dominicanos sean más apetecibles en comparación con activos en dólares en EE.UU., y le dará mayor margen al Banco Central de República Dominicana para reducir su tasa de interés y se reducirán las presiones sobre el precio del dólar, lo cual es positivo para los negocios y la economía familiar, agrega.
“Sin embargo, si la economía americana se desacelera mucho, podemos esperar menos remesas de los dominicanos en EE.UU., menos turistas y menos demanda por nuestras exportaciones”, sostuvo el coordinador de la Escuela de Economía del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (Intec).
Pérez Ducy, en tanto, cree prudente esperar a ver si es una ola pequeña o grande, porque igual el mercado rebota en una semana.
Aduce que la actual situación pudiera ser una sobre-calentación a una noticia potencial, pero hay otro riesgo es que complica el creciente conflicto de Medio Oriente.
“De prolongarse el negativismo, o suceder realmente una recesión, se afectarían las actividades de zonas francas y turismo, con cierto rezago”, indicó.
Alerta News informó a primeras horas de este lunes de una sacudida en los mercados globales por las perspectivas de una recesión en Estados Unidos. Esto tendría un negativo impacto en el comercio global, las inversiones y la estabilidad financiera.
Al respecto, también opinó el economista LuisVargas.
A juicio de Vargas, el Financial Times informó sobre la perspectiva de recesión en Estados Unidos y el consecuente impacto negativo en los mercados financieros transnacionales, a sabiendas de que este país sufre hace varios años una tendencia recesiva de las actividades productivas y laborales
Prevé una imparable depreciación de la moneda nacional- internacional dólar y consecuente desafío de pérdida de importancia en la economía mundial y escalada alcista del precio del oro en los mercados multinacionales, y desempleo, no obstante el maquillaje de las cifras, sobre todo después de la pandemia.
“En estas circunstancias, no se puede esperar menos que la marcha crítica de la economía real se combine con la negativa de la economía financiera y consecuentes desvalorización de activos de las finanzas y quiebras”, dice.
Y, ni hablar de la propia amenaza de la crisis política interna, y los Brics, mientras los problemas, desafíos y conflictos dominicanos no cesan de aumentar, especialmente por las inapropiadas gestiones de los subsidios y transferencias de capitales al negocio de la energía eléctrica, las transferencias corrientes y autorizaciones de la incontenible emisión de valores en circulación y las cuestiones de Haití, los migrantes haitianos y los dominicanos, señaló.
En el caso de RD, dijo: “sufriremos los ineludibles vientos de cola”, en un escenario de restricciones crecientes de acceso a los capitales prestamos, inversiones directas extranjeras, recaídas de donaciones.
Vargas también prevé un agravamiento del déficit de las cuentas comerciales, corrientes y fiscales por las razones múltiples de caída de las transacciones mercantiles, desaceleración de las divisas turísticas, desescalada de las remesas.