
La decisión ha sido comunicada en una carta remitida a Harvard y firmada por la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, que reza: “Les escribo para notificarles que con efecto inmediato, el programa de la Universidad de Harvard de Estudiantes y Visitantes Extranjeros ha sido revocado”.

En respuesta, el Gobierno recortó más de 2,000 millones de dólares en fondos federales para investigación, lo que dio lugar a una demanda en curso por parte de Harvard para recuperar los fondos.
El Departamento de Seguridad Nacional afirmó que la sanción se debió a una exigencia a Harvard de proporcionar información sobre la criminalidad y la mala conducta de los estudiantes extranjeros.
Noem dijo que los registros proporcionados por la institución el 30 de abril eran insuficientes, y que los intentos posteriores de obtener más información de la escuela no satisficieron al Gobierno.
La carta precisó que, si Harvard desea recuperar su capacidad para matricular a estudiantes internacionales para el semestre de otoño, la universidad debe proporcionar todos los registros y archivos de audio y video que involucren actividades peligrosas, amenazantes o ilegales por parte de un estudiante no inmigrante inscrito en los últimos cinco años.
La institución de educación superior también deberá entregar todos los archivos de video y audio que posea sobre las actividades de protesta que involucren a alumnos extranjeros en el campus de Cambridge, indicó Noem.



